El Athletic Club ha vivido unas últimas temporadas para el olvido. Sumido en una importante crisis institucional y jugando peligrosamente con los puestos de descenso en el apartado deportivo, el Athletic se ha convertido en una sombra de aquel histórico conjunto fiero, aguerrido y competitivo que se codeaba con la jet set de la Liga española años atrás. El pasado jueves se celebraron las elecciones para determinar quien sería el nuevo presidente de los rojiblancos, con victoria final de Fernando García Macua, quien se impuso por 750 votos al segundo candidato más votado, Juan Carlos Ercoreca. Hay que resaltar la cantidad de papeletas en blanco que se introdujeron en las urnas, 2025 votos (un 11,72% de todos los votos escrutados) fiel muestra del descontento general que vive el socio rojiblanco por las temporadas pasadas y por la poca ilusión que han despertado los proyectos presentados.
El primer paso que debe tomar García Macua, para recuperar el status que se merece el tercer club de España con más títulos y el tercero de la clasificación histórica, es contar con cierta estabilidad en su cúpula dirigente. Si la cabeza del club no funciona como es debido, el resto de la estructura se resiente. Partiendo de esta solidez, el club debe reforzar consecuentemente la primera plantilla para no volver a pasar los apuros de la pasada campaña. Es realmente plausible que, teniendo en cuenta los tiempos que corren, con conjuntos que pueden prescindir de emplear futbolistas nacionales en su once inicial, el Athletic siga creyendo en su filosofía centenaria. Sin embargo, tal y como esgrimió el técnico que alcanzó la salvación, José Manuel Esnal 'Mané', si el Athletic quiere ser competitivo, debe contar con los mejores jugadores del País Vasco y Navarra en sus filas.
Todo indica que Joaquín Caparrós será el encargado de dirigir el nuevo proyecto bilbaíno, un técnico de raza y carácter que puede adecuarse a las características que se le presumen a los 'Leones'. Junto a él y a David López, ya presentado por la gestora, llegarán Aitor Ocio e Iñaki Muñoz, fichajes confirmados por García Macua, y probablemente Xabi Prieto y Ezquerro, futbolistas que le pueden venir muy bien al Athletic. Pero además del primer equipo, cuidar la cantera debe ser la prioridad máxima para un club con la idiosincrasia del Athletic. Sin futbolistas que alimenten al primer equipo en un futuro, los 'Leones' no tienen opciones de éxito.
García Macua tiene mucho trabajo por delante para que los bilbaínos vuelvan por sus fueros y muy poco tiempo para llevarlo a cabo. Si el Athletic no quiere sufrir de nuevo en el curso 07-08, debe recuperar las materias no aprobadas en verano e 'hincar codos' para mejorar en septiembre.
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